Llueven los dólares del campo, pero hay cuentas en rojo: qué pasará con el tipo de cambio y qué hará el Gobierno
El tiempo de la cosecha gruesa y la posibilidad de liquidarla con un menor nivel de retenciones entra en la recta final, con un récord de declaraciones juradas de exportaciones que dejan una certeza pero también una duda. La primera es que la lluvia de agrodólares se extenderá, al menos, hasta la tercera semana de julio. La segunda es qué ocurrirá con el tipo de cambio, que en la última rueda registró una fuerte presión compradora que acercó al dólar oficial a $ 1200, y la posibilidad de incrementar las reservas el día después que se apague la oferta del campo.
La fecha estimada responde a las reglas dispuestas por el Gobierno. Los derechos de exportación se fijan al momento de anotar la declaración jurada, por lo que las cerealeras se apuran hoy a aprovechar la rebaja de la alícuota al 26% pese a no haber hecho el embarque del producto, ya que la misma, como señaló en más de una ocasión Economía, solo estará vigente hasta el lunes, inclusive, antes de retomar el nivel de 33%.
La operatoria de estos días no resulta una novedad. Como recuerdan los especialistas del sector, es habitual cuando se esperan cambios inminentes, ya que le permite al exportador aprovechar el plazo de 15 días hábiles para liquidar el 95% de las divisas.
Por ello, el actual escenario de oferta y demanda de divisas se modificará recién a fines del mes próximo, cuando ya el campo no sea un jugador importante en el mercado de cambios y no haya aún quien cubra ese espacio en la misma proporción. Porque si bien en las proyecciones que realiza Economía, el superávit comercial que aportarían sectores como la energía y la minería estaría cerca de duplicar la balanza agrícola en ocho años, hoy su participación está por debajo de la mitad del monto de agrodólares que deja el campo.
El dato, en la mirada de algunos especialistas, podría sumar complicaciones a un escenario en el que, por decisión del Gobierno, el Banco Central optó por no adquirir divisas para sus reservas pese al flujo que ofrecía el campo y los compromisos asumidos con el FMI. Y porque el fuerte incremento de las importaciones de bienes y servicios alimenta un déficit de la cuenta corriente que ya en el primer trimestre alcanzó a u$s 5191 millones, según reveló el Indec.
Cuántos dólares tienen los argentinos en el colchón
Sin embargo, para el viceministro de Economía, José Luis Daza, ese déficit no amerita mayor preocupación, ya que debido al crecimiento económico "es normal y está bajo control". Como tampoco debe alertar, para el vicepresidente del BCRA, Vladimir Werning, no sumar dólares en el mercado de cambios, ya que cuentan con los del préstamo del FMI, el REPO y la emisiones de títulos. "No tenemos urgencia. Vamos a ir acumulando reservas en la medida en que las condiciones nos favorezcan", señaló. Las que pudo aportar el campo este año, dejarán de estar disponibles en un mes.